Pocos
días después de que Mauricio Rodas asumió la Alcaldía del Distrito Metropolitano de Quito y cuando todavía
no tenía un equipo de trabajo definido se daba la orden de suspender la transmisión
del programa “El Poder de la Palabra”
en los medios públicos Radio Municipal 720 AM y en Distrito FM 102.9. Ante la
protesta de su productor Francisco Herrera Arauz, Rodas aceptó que se trataba
de un “error administrativo” a la vez
que pedía se reinicie la retransmisión de los programas amparadas en un
convenio entre Ecuador Inmediato y el Municipio de Quito vigente hasta el 31 de
diciembre pasado. Herrera Arauz tomó la decisión de no continuar con el convenio
y reservarse el derecho de llevar su caso a las instancias legales pertinentes.
Así, el 23 de
octubre del año pasado y luego de haber agotado los mecanismos de mediación
planteados por Ecuador Inmediato, Francisco Herrera Arauz presentó una denuncia
frente a la SUPERCOM con más de 20 pruebas entre las cuales estaba la misma
carta que Rodas le envió meses antes donde reconocía lo del “error administrativo”. La SUPERCOM entonces
juzgó sobre la base de la información presentada que el Municipio de Quito
había incurrido en censura
previa tipificada en el artículo 18
de la Ley Orgánica de Comunicación y procedió a sancionar a su representante
(Mauricio Rodas) con una multa equivalente a 10 salarios básicos.
Al ser notificado
el Alcalde; dando una vez más muestras de su “optimismo” declaró que cuando se
enteró de la resolución pensó que era
una inocentada para luego calificar a la decisión de la SUPERCOM de “ilegal, ilegítima y absurda” y
sosteniendo que no se acogería a la multa haciendo uso de su derecho a la
resistencia[1].
Para Rodas la resolución de la SUPERCOM tiene claras motivaciones políticas y
por tanto está destinada sólo a continuar lo que denomina una campaña en su
contra; sin duda interesante apreciación sobre lo que significa para él la
libertad de expresión. Pero vamos más atrás; durante la campaña para la alcaldía
en febrero pasado Rodas en una entrevista con Andrés Carrión luego de ser
consultado sobre lo que pensaba sobre la libertad de expresión respondió lo
siguiente:
Nosotros siempre hemos defendido el derecho absoluto a la libertad de expresión que está consagrado además en la Constitución y en Tratados Internacionales suscritos por el Ecuador; cualquier acto que viole, que atente contra la libertad de expresión por supuesto va a merecer nuestro rechazo, yo pienso que la libertad de expresión es la esencia misma de la democracia y cualquier acto que atente contra ella sin duda tendrá nuestra crítica.
Está claro que en
ese entonces Rodas estaba actuando con la máscara de “defensor de la libertad
de expresión” y vio en la pregunta una ocasión para hacer referencia a las
supuestas violaciones en las que cae el Gobierno Central, hasta ahí entendemos
su respuesta pues no podía “desperdiciar” la oportunidad de mostrarse como una
figura anti Correa y por ende anti Barrera, mas, los principios básicos que se
esconden en la respuesta deberían guiar su accionar.
El derecho a la
resistencia se consagró en la Constitución para proteger a los ciudadanos de
acciones del poder o de otras personas que vulneren sus derechos; preguntarle
al Sr. Alcalde cuáles de sus derechos fueron vulnerados con la disposición de
la SUPERCOM y por último si él considera que estos derechos supuestamente
vulnerados son mejores o están en mejor puesto que la libertad de expresión
consagrada en el respeto a las normas establecidas entre las dos partes y no
dar paso a la transmisión del programa en clara censura previa.
El 5 de enero se
celebró en Quito el día del Periodista, la UNP realizó un evento a los pies de
la estatua de Espejo en el Bulevar de la 24 de mayo con la presencia de pocos
asistentes entre los cuales destacaba Mauricio Rodas quien una vez más con el
optimismo que ya le caracteriza había anunciado en su twitter que daría una “noticia importante” que en realidad
resulto ser “comprometer” todos sus
esfuerzos para rebautizar al sitio como Plaza de los Periodistas. En su discurso
Rodas dijo que la libertad de expresión “contribuye
significativamente a la construcción de una sociedad más pluralista, más
democrática” a la par que sostenía que es “imposible pensar en un país democrático y pluralista sin que los
periodistas tengan absoluta libertad para realizar su trabajo” tan sólo
recordarle al Burgomaestre que una de las principales violaciones a la libertad
de expresión constituye la censura previa a los contenidos de los programas y
que no podemos entender como alguien que al menos discursivamente le da un peso
tan grande a la libertad de expresión reduzca lo que pasó con Ecuador Inmediato
a un “error administrativo” negándose
a reconocerlo como una violación a la libertad de expresión y no acepte la
multa impuesta.
Continuamos a la
espera de que el Alcalde cambie su postura y lleve su defensa de la libertad de
expresión del discurso a la acción.
[1] El derecho a la resistencia está consagrado en el Art. 98 de la
Constitución que dice que los individuos y los colectivos podrán ejercer el
derecho a la resistencia frente a acciones u omisiones del poder público o de
las personas naturales o jurídicas no estatales que vulneren o puedan vulnerar
sus derechos constitucionales y demandar el reconocimiento de nuevos derechos.