Hay varios estudios que analizan la correlación entre velocidad y
accidentabilidad en la vía. Así, un aumento de un kilómetro por
hora en la velocidad aumenta en un 5% la posibilidad de sufrir lesiones y en un
7% la de un accidente fatal.
El exceso de velocidad reduce el tiempo que
tiene un conductor para evitar un accidente mediante una acción evasiva como
frenar. Por otro lado, al superar el límite de velocidad para la que fue
diseñada la vía se ponen en riesgo factores claves para la seguridad vial como
son; la estabilidad del vehículo y la visibilidad del conductor, si a esto se
suman vías con curvas pronunciadas y condiciones atmosféricas nubladas como las
que enfrenta la capital se convierte en una receta para el desastre.
De acuerdo con este medio de comunicación en Quito se dan un
promedio de 38.6 accidentes de tránsito por día, tan solo en los primeros 22
días de marzo se produjeron 917 accidentes con 482 heridos y 16 fallecidos. Para comparar en los primeros tres meses del 2014
se registraron 829 accidentes con un total de 31 muertos, es decir que tan solo
en los 22 días de marzo ya se ha superado el 100% de los accidentes el año
pasado en un periodo tres veces más largo. Un informe del Instituto de la Ciudad sostiene
que para el 2012 se registraba un promedio de 13.3 fallecidos por cada 100 mil
habitantes. También sobre la cifra de este año.
En comparación con los otros años lo que va del
2015 da visos ya de convertirse en uno de los años más accidentados en cuanto a
este tipo de siniestros desde que se introdujo el cambio en los límites de
velocidad. Una reducción de 20 km/Hr (de 110 a 90 Km/hr) tiene como resultado
una reducción del 21% en accidentes fatales, luego de que en el país se
introdujeron los cambios en velocidad se vio una reducción en la
accidentabilidad de las principales vías a nivel nacional. Resulta entonces una
tarea para las autoridades en Quito analizar el porqué del repunte de
éstos índices más allá de lanzar un
pedido comedido de “manejar con precaución” (una de las soluciones, no la
única).
En el caso particular de la av. Simón Bolívar ésta
constituye la única “vía de paso” que permite recorrer Quito lo que hace que
sea una vía que soporta gran cantidad de tráfico pesado unido a una aparente
falla de diseño que torna altamente peligrosos algunos de sus tramos; entre el
11 de noviembre y el 31 de diciembre del 2013 se registraron 50 accidentes; en
comparación en los primeros 23 días de marzo se produjeron 85 siniestros con 3
fallecidos y 35 heridos. La actual administración ha reiterado lo que ya se
dijo antes, la av. Simón Bolívar tiene problemas en su diseño en varias partes
de su trazado lo que hace que los vehículos sean más propensos a perder
estabilidad cuando la recorren a altas velocidades; sabiendo esto resulta
indispensable aumentar el control de los organismos competentes a fin de
reducir el índice de accidentabilidad en esta vía.
Rocío Pérez