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jueves, 11 de agosto de 2016

Rodas, 175 días ausente de la alcaldía




“Pata caliente” así se llama a las personas que no paran en casa y que se la pasan viajando por el mundo.  Lejanos al mundo real y sus problemas, disfrutando los placeres del turista. Sin duda este sería el apelativo perfecto para describir a don Mauricio Rodas el actual alcalde de nuestra querida pero tan olvidada ciudad.

Sepan ustedes que el burgomaestre registra en un período de un año y cuatro meses nada más y nada menos que 31 viajes a su favor, con destino a 12 países diferentes y con un total de 175 días ausente de la alcaldía.  Entre marzo de 2015 y agosto de 2016 el alcalde fue 12 veces a Estados Unidos, Brasil 1, México 1, Panamá 1, Colombia 5, Reino Unido 1, Argentina 2, Francia 1, Holanda 1, Italia 1, Chile 2, Perú 3.

Entiéndase la magnitud de su ausencia si analizamos que en dos años como alcalde estuvo alejado de la ciudad casi seis meses. Y pesa más aún cuando tiene en lista de espera un centenar de problemas ciudadanos por resolver que van acumulando un malestar generalizado tanto en los quiteños que votaron por él como en los que no lo hicieron. 

Para muestra un botón, las últimas protestas han venido de diversos sectores: regularización de miles de taxistas informales, aprobación de nuevas tarifas de transporte interparroquial, reubicación de trabajadoras sexuales del centro histórico, regulación de venta informal y de microempresarios de “Food Truck”, entrega de casas del plan habitacional bicentenario, quiteños opuestos a los proyectos Quito Cables y Guayasamín, taurinos y antitaurinos, familiares de bomberos fallecidos, entre otros que se suman al malestar diario de los quiteños: tráfico, basura, obras inconclusas y por hacer. Una infinidad de problemas que no encuentran una solución y con una población que aumenta cada día su inconformidad con la administración de la ciudad. 

Ya lo dijo su propio asesor Jaime Durán Barba, “este chico que nada conocía de la ciudad muestra total inoperancia y falta de liderazgo” ¿Debe de ser difícil gobernar una ciudad desde la distancia verdad? ¿Cómo se puede sentir el malestar de los quiteños para que sus problemas se resuelvan cuando poco o nada se conoce de ellos, cuando más se ha visitado la ciudad de Miami (70 días) que los barrios del sur como el 11 de Mayo, Cipreses o Vista Hermosa; barrios sin agua, sin servicio eléctrico, sin alcantarillado, sin servicios básicos para poder “vivir mejor”. Y este es solo un pequeño ejemplo en medio de la inmensidad de la desolación que invade la ciudad en los últimos dos años. 

Poco nos importa la vida privada del alcalde, pero si llama la atención que decidiera que su último hijo nazca en Miami y no en Quito, su propia ciudad.  ¿Acaso el país no cuenta con un buen servicio de salud, con buenos profesionales? Tal desaire nos dejó claro el poco cariño que él y su familia le tienen a la ciudad capital y a su gente.

Ausente en la ciudad y ausente a la hora de encarar las dificultades citadinas, este debe ser el justificativo del sinnúmero de veces que hemos visto al alcalde ofreciendo un día una cosa y rectificando al siguiente, inaugurando obras que carecen de estudios y presupuestos, haciendo ruedas de prensa con discursos memorizados y mal elaborados por un grupo de asesores que se empeñan en presentar la cara bonita que no existe, mostrando proyectos caducos y lejanos a los intereses de sus habitantes, errando una y otra vez en los procesos administrativos, hablando en una radio o en un canal de televisión de un Quito de fantasía donde todo es de colores, ofreciendo “el oro y el moro” cuando fuera de la alcaldía la gente grita a diario: ¡FueraRodasFuera! ¡AlcaldeMetiroso! ¡QuitoSinAlcalde! ¡QuitoBuscaAlcalde!

¿Y por qué tanto viaje?, ¿existe algún beneficio para la ciudad, acaso se ha logrado alguna inversión extranjera de importancia? ¿Por qué Miami es la ciudad predilecta del alcalde, las visitas son de placer o para copiar algún modelo exitoso? ¿Alcalde de Miami o de Quito? ¿Quién paga los viajes del alcalde? ¿El sueldo de alcalde le permite financiar los innumerables pasajes de avión y su estadía? 

Mauricio Rodas “Pata caliente” nada ha hecho por mejorar la vida de los quiteños, tiene como importantes pendientes el tema de movilidad, el flujo vehicular que colapsa las calles, sus obras son migajas a penas.

Muchas dudas se generan alrededor de estos viajes, un evidente descuido por parte de la principal autoridad de una ciudad que crece en medio del desorden y de la ausencia de un líder que se “ajuste los pantalones” y tome “la sartén por el mango”. 

Electores y no electores cada vez confirmamos que el error de elegir un candidato improvisado, con un discurso sin contenido pero bien adornado, con poca lucidez administrativa y ningún conocimiento de la ciudad nos está pasando factura.


Gabriela Cifuentes