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martes, 19 de mayo de 2015

Una cosa es con guitarra y otra con violín


Una cosa es con guitarra y otra con violín es un viejo refrán que hace alusión a que la ejecución de una tarea puede parecer sencilla pero ya en la práctica resulta mucho más compleja. Esto le ocurre al actual alcalde de Quito, el abogado Mauricio Rodas, quien en campaña electoral prometía a los electores  que  “Sí  se  puede  vivir  mejor”  oferta  vacía  que  venía  acompañada  de  una  serie  de ofrecimientos que solo algunos notaban tenían un alto contenido de demagogia, ya que no solo se anunciaban más obras sino también menos impuestos, una contradicción conceptual en la gestión pública. 

Ya ha pasado un año desde que Mauricio Rodas asumió la alcaldía sin embargo son pocos los ofrecimientos de campaña que muestran avances.  El ofrecimiento principal era continuar con la construcción del Metro de Quito, obra cuya planificación, financiación e inicio de la construcción obedeció a la gestión del anterior alcalde Augusto Barrera, siendo que se dejaba pendiente la contratación de la segunda fase (el túnel y la mayoría de estaciones) y la tercera fase (los trenes) lo cual todavía no ha podido ser concretado por el actual alcalde.  

Las excusas para avanzar en esta tarea sobran pues en campaña se dijo textualmente: “... nosotros no vamos a hablar del Metro de Quito, nosotros lo vamos a hacer...”. Que falten por financiar alrededor de 500 millones de dólares debería de ser sí una dificultad pero no una excusa, pues 500 millones de dólares financiados a 20 años y a una tasa del 3% anual, que son las condiciones de los 1,500 millones ya conseguidos en los multilaterales por la anterior alcaldía, implica pagar cuotas adicionales  de  poco  menos  de  34  millones  de  dólares  por  año  a  lo  que  inicialmente  estaba planificado.  

Conseguir anualmente 34 millones adicionales para una ciudad de más de dos millones y medio de habitantes, es decir poco menos de 15 dólares por persona, no debería de ser difícil más aún cuando actualmente se decide por presión política otorgar subsidios a los dueños de buses por un monto de 21 millones de dólares anuales y se desperdiciaron casi 4 millones de dólares en el concierto de Sting -por cierto un evento muy distante en calidad y audiencia al de Rock en Rio o el Festival  de  Viña  del  Mar  que  fue  lo  ofrecido-  lo  cual  evidencia  que  no  existe  una  adecuada priorización de los recursos públicos.  

Plantear  soluciones  para  la  financiación  de  obras  no  debería  de  ser  difícil,  si  Quito  tiene actualmente alrededor de 600 mil vehículos privados que congestionan diariamente la ciudad, siendo que estos solo transportan aproximadamente al 25% de los habitantes y la mayor parte de estos ciudadanos pertenecen a los dos quintiles de mayores ingresos, lo más justo sería que estos individuos sean quienes financien en mayor proporción la brecha para el metro y demás obras de movilidad. Una tasa a la gasolina de no más de 25 ctvs de dólar por galón, que incrementaría en un 12.5% el costo de moverse en automóvil privado sería más que suficiente para financiar la brecha financiera para el Metro de Quito e incluso financiar e iniciar varias obras más como los ejes viales Este-Oeste, un tren de cercanías para el valle o a la vía Gualo-Puembo que también obedecieron a los ofrecimientos electorales de Mauricio Rodas y que al parecer han sido olvidados por la opinión pública, pues nadie exige ni siquiera los estudios para estas obras.

Cabe recordar que hace poco la carrera mínima del taxi aumento en 45 ctvs de dólar o 45% tomando en cuenta que esta solía costar 1 dólar, siendo que este es un servicio que lo demanda principalmente la clase media por lo cual el discurso populista de cuidar el bolsillo de los quiteños no debería de impedir que esta propuesta ciudadana, una tasa de 25 ctvs por galón de gasolina para financiar exclusivamente obras de movilidad se ponga en marcha por parte de la actual alcaldía. Ya ha pasado un año de gestión y si no se toman medidas serias sobre el tema de la movilidad muy difícilmente los quiteños podremos “Vivir Mejor” al terminar esta alcaldía, pues una cosa es con guitarra y otra con violín alcalde Mauricio Rodas.   

Juan Pablo Jaramilllo 

Twitter: @jpjaramillo25